Estudiante de la Universidad de Buena Vista mantiene sueño universitario

Rocío Flores González, estudiante del segundo año en la Universidad de Buena Vista (BVU) en Storm Lake, sirve a su comunidad a través de las oportunidades que el programa AmeriCorps brinda en lugares como Methodist Manor. Rocío es la primera persona…

Rocío Flores González, estudiante del segundo año en la Universidad de Buena Vista (BVU) en Storm Lake, sirve a su comunidad a través de las oportunidades que el programa AmeriCorps brinda en lugares como Methodist Manor. Rocío es la primera persona en su familia en asistir a la universidad. Ella está agradecida por sus padres y por los donantes y miembros del personal de BVU que ayudan a hacer posible el programa.

Tim Gallagher
Comunicaciones y Mercadero BVU

Rocío Flores González es una estudiante del segundo año en la Universidad de Buena Vista de Storm Lake. Con su entusiasmo y dedicación estudiantil, Rocío combina la teoría que recibe durante sus horas de clases con la práctica del servicio comunitario al que se dedica de lleno no solo por cubrir los requisitos de su currículo universitario sino porque ayudar a los demás, es parte de su carácter y personalidad.

Durante el último año de secundaria en Sioux Central high school de Sioux Rapids, Rocío exploró las opciones para ingresar a la universidad. Su horizonte se abrió cuando la Universidad de Buena Vista introdujo Educación por el Servicio (Education for Service), una iniciativa por la cual los estudiantes universitarios de primera generación del condado de Buena Vista participan en un programa de desarrollo de liderazgo de cuatro años, que incluye completar 300 horas al año de servicio comunitario a través de AmericaCorps a cambio de pagar los aranceles de matrícula.

Rocío acompañada de vigilante lleva alegría y compañía a los residentes del asilo de ancianos Methodist Manor de Storm Lake.

Rocío acompañada de vigilante lleva alegría y compañía a los residentes del asilo de ancianos Methodist Manor de Storm Lake.

Rocío solicitó la admisión a la universidad, presentando una serie de trabajos voluntarios que ella realizó durante su tiempo de estudiante de secundaria, como disfrazarse de duende en el programa navideño de la biblioteca publica de Rembrandt hasta servir como ayudante en las aulas de los grados primarios.

Los padres de Rocío al darse cuenta de que la universidad de Buena vista tenia el programa de horas de servicio por matricula, no solamente estaban felices, sino que también la motivaron para que ingresará.

Hoy, ella es una de las 10 estudiantes de la primera sección del grupo de Educación para el Servicio de la Universidad de Buena Vista.

“Mis padres son inmigrantes de México y han trabajado muy duro para mantener a sus hijos, haciendo trabajo en la línea de producción de Tyson Foods de Storm Lake. Ellos ven la educación como una forma de avanzar en la vida.” Dice Rocío.

Después de sus clases, Rocío visita el asilo de ancianos Methodist Manor de Storm Lake, con ella lleva a vigilante, que es un perro de dos años de edad con mescla de labrador y husky. “Los residentes de Methodist Manor lo aman. Tanto a vigilante como a mí, nos encanta visitar el centro para llevar brillo a sus vidas y nosotros disfrutamos escuchar las historias de los viejitos. Es un lugar maravilloso.”

Además del tiempo que ella pasa con los residentes de Methodist Manor, la pronto futura relacionista publica también ayuda en el centro canino TLC en Newell, asiste a la Doctora Andrea Frantz profesora de medios digitales de la universidad de Buena Vista, cuando esta imparte clases de ciudadanía dos veces al año en la biblioteca publica de Storm Lake. 

Rocío dice que, “Ayudo a la Doctora Frantz como interprete o cuidando a los niños mientras sus padres se preparan para presentar el examen de ciudadanía,”

Y es que Rocío juega con los niños pequeños mientras sus madres estudian la historia de los Estados Unidos en preparación para el examen. Ella dice que ve a la mujer trabajando duro y no puede evitar sentirse agradecida por los sacrificios que hacen sus padres y por la beca que recibe a medida que avanza en su educación.

“He visto las dificultades por la que pasaron mis padres, y estoy trabajando para que ellos se sientan orgullosos de mí.”

Con dedicación a sus estudios y su trabajo al servicio comunitario, Rocío no solo planea hacer que sus padres se sientan orgullosa de ella, sino que también es su forma de agradecer aquellos que ayudan financiar el programa EFS, ya que la generosidad de esas personas permite que Rocío visualice su futuro como una graduada de la Universidad de Buena Vista; con una deuda mínima.

“Mis planes son graduarme con una deuda de menos de $2,000.”  

Todos los años durante las vacaciones de verano, Rocío trabaja en el área de Mantenimiento en Tyson Foods. “Vengo de una familia de bajos ingresos que está comenzando en un nuevo país. El programa de EFS me permitirá comenzar mi vida como una adulta y con muchos conocimientos sobre nuestra comunidad y las personas que la integran. Me ha permitido encontrar una segunda casa en la Universidad de Buena Vista.”

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Buena Vista University student maintains university dream

Tim Gallagher
Communications and Merchant BVU

Rocío Flores González is a second year student at the Buena Vista University of Storm Lake. With his enthusiasm and student dedication, Rocío combines the theory he receives during his class hours with the practice of community service to which he dedicates himself fully not only to meet the requirements of his university curriculum but also because helping others is part of Your character and personality.

During the last year of high school at Sioux Central High School in Sioux Rapids, Rocío explored the options to enter the university. Its horizon opened when the University of Buena Vista introduced Education for Service, an initiative whereby first-generation college students from Buena Vista County participate in a four-year leadership development program, which It includes completing 300 hours a year of community service through AmericaCorps in exchange for paying tuition fees.

Rocío applied for admission to the university, presenting a series of volunteer works that she did during her time as a high school student, such as dressing up as an elf in the Christmas program of the Rembrandt public library until serving as an assistant in the classrooms of the primary grades .

Rocío's parents, realizing that the University of Buena Vista had the program of hours of service per enrollment, not only were happy, but also motivated her to enter.

Today, she is one of the 10 students in the first section of the Service Education group at the University of Buena Vista.

“My parents are immigrants from Mexico and have worked very hard to support their children, doing work in the production line of Tyson Foods of Storm Lake. They see education as a way to move forward in life. ” Rocío says.

After her classes, Rocío visits the Storm Lake Methodist Manor Nursing Home, with her she takes a watchman, who is a two-year-old dog with a labrador and husky mix. “The residents of Methodist Manor love it. Both vigilant and me, we love visiting the center to bring brightness to their lives and we enjoy hearing the stories of the old men. It is a wonderful place. ”

In addition to the time she spends with the residents of Methodist Manor, the soon-to-be public relationist also helps at the TLC dog center in Newell, Dr. Andrea Frantz is a professor of digital media at the University of Buena Vista, when she teaches citizenship twice a year in the Storm Lake public library.

Rocío says that, "I help Dr. Frantz interpret or take care of the children while their parents prepare to take the citizenship test,"

And it is that Rocío plays with young children while their mothers study the history of the United States in preparation for the exam. She says she sees the woman working hard and cannot help feeling grateful for the sacrifices her parents make and for the scholarship she receives as she advances in her education.

“I have seen the difficulties my parents went through, and I am working to make them proud of me.”

With dedication to her studies and her work in community service, Rocío not only plans to make her parents proud of her, but also to thank those who help finance the SAI program, since the generosity of these people allows that Rocío visualize her future as a graduate of the University of Buena Vista; With a minimum debt.

"My plans are to graduate with a debt of less than $ 2,000."

Every year during summer vacations, Rocío works in the Maintenance area at Tyson Foods. “I come from a low-income family that is starting in a new country. The SAI program will allow me to start my life as an adult and with a lot of knowledge about our community and the people that comprise it. It has allowed me to find a second home at the University of Buena Vista. ”